viernes, 8 de febrero de 2008

El profesor de guitarra

Me abrió la puerta él.
Todo barba, todo pelo.
Yo había cumplido los 15.

Preguntame cómo fue, pero me enamoré. Solitariamente y sin saber. Él solo me enseñaba guitarra.
Y allá subía las calles del cerrito e inventaba mil historias en mi cabeza imaginando que él pudiera fijarse en mi.
Mis amigas no entendían. Cuando, por alguna artimaña extraña, lograron conocerlo, casi se desmayan. "Esa cosa te gusta?" No solo me gustaba, sino que era el sujeto-objeto de mis llantos diarios. No solo me gustaba, sino que yo creía morir por él.
Busqué y busqué y encontré un poema de Delmira. Lo escribí a máquina y se lo mandé por correo. En el sobre decía: ".... 21-72"
A la clase siguiente me enfrenta: "Esto, ¿me lo mandaste vos?" Y me muestra el sobre. Y me dice que piensa que fui yo porque nadie escribe los números de la casa así, separados por un guión, y que él me había visto hacerlo.
Mierda! ¡que observador! pensé.
Y negué. Toda roja, negué sorprendida y seguimos con la clase.
Nunca, les juro que nunca más escribí así los números. De allí en más eliminé el guión del medio.

1 comentario:

Anna Donner dijo...

¡Hola Sylvia! Recién hoy descubro tus blogs en blogspot. Ay estas historias... en las que una se acuerda y se quiere matar. Esos amores que una siente que de verdad vive, come, existe, se levanta se acuesta, en definitiva, todo pasa por él. Una vez a mi me gustaba un chico que era compañero en el Anglo. El super pintón, yo una flacucha, con catorce. Un día, la profesora nos puso juntos, para hacer un ejercicio. Ay, todavía me acuerdo, no dormí en toda la noche, ya me imaginaba poco menos que casada con él. Sabía que ómnibus tomaba (el 116), que lamentablemente no me servía, a partir de ese momento pensaba que lo iba a encontrar en cualquiera de los bailes de los liceos. Yo iba al JPVarela. Lo que me acuerdo es todo lo que pensaba en él, ese verano del 82, y fin del año del 81, todos mis pensamientos pasaban por él, todas las canciones, las pensaba y en él, a todos lados donde iba, pensaba en él, y ahora, todavía me acuerdo todas las cosas que pensaba pensando en él...
Besos !